Polvorones de Naranja

     Presenté esta receta para mi examen de las clases de cocina de mi colegio hace mucho, mucho tiempo.  Fue desde entonces una de mis preferidas  para agasajo personal y de mi familia.  Les aconsejo que la prueben.

Ingredientes:

azúcar  150 grs. (3/4 de taza)
harina  500 grs.  (4 tazas)
mantequilla  250 grs.
2 yemas de huevo
1/2 cdita. bicarbonato
200 grs. azúcar glass
1 o 2 naranjas
 
     Se bate la mantequilla hasta que se acreme;  se agrega el azúcar, las yemas de huevo y se bate más.  Cuando ha esponjado bien, se añade la raspadura de la naranja, el zumo y por último, el harina cernida juntamente con el bicarbonato.  Se mezcla bien.  Se vacía en la tabla enharinada y se amasa un poco.  Ya que no se pega, se deja reposar durante 10 minutos..  Se extiende la masa con el palote de 1 cm. de grueso y se cortan con el molde o con un vaso.
     Se untan ligeramente con mantequilla las charolas para horno y se meten a 300 grados F. por solo cinco minutos aproximadamente porque se sacan casi blancos.
     Una vez horneados y calientes todavía, se bañan con el azúcar glass.

Mi viejo y querido recetario

     Los pequeños detalles de nuestras vidas son tan importantes y enriquecedores que, sin darnos cuenta, hacen que nuestros proyectos sean grandes y fructíferos.
     El 'pequeño-gran detalle' de todo lo que hacemos y en este caso al elaborar una receta de cocina, es el 'toque' personal que cada quien aporta con dedicación y cariño.
     Pongamos nuestro 'toque' de amor en la cocina y seamos felices.

    Al descubrir el fascinante mundo del internet unido a una experiencia como es crear un blog, me decidí por compartir mi antiguo recetario.
     Años enteros estuvo mi recetario guardado en una caja con otras pertenencias.  La causa:  vine a vivir a España y no pude viajar con tantos libros como tenía.  Fue tan grande mi alegría cuando al regresar lo volví a encontrar, que desde entonces no pienso volver a dejarlo.
     La mayoría de las recetas y consejos que tengo en mi recetario pertenecen a mis clases de cocina en el colegio.  Por lo tanto me traen gratos recuerdos y algunas de ellas han formado parte de mi vida.
     No es que me guste mucho cocinar, pero he tenido tanto éxito con las recetas de mi querido recetario, que al menos me he defendido y he compartido momentos maravillosos con mi familia.